¿Sientes un llamado que te invita a cambiar tu vida pero aún no tomas la decisión? ¿te produce miedo la idea de hacer algo diferente? Respira, muchos hemos pasado por eso, es parte natural de nuestra experiencia humana. Una vez que hemos aprendido lo suficiente en una etapa, llega el momento de moverse y subir un nuevo escalón de la vida.
Enseguida te comparto unas sencillas pero poderosas preguntas que te brindarán mayor claridad para tomar decisiones importantes hacia el cambio que tu vida anhela.
¿Tu corazón anhela un nuevo camino?
Hace algunos años pasé por un periodo en el que solamente iba en automático, llegué a un punto en el que me dije a mí misma «no sé que estoy haciendo aquí; no estoy disfrutando mi vida; quiero una nueva vida aunque no sé exactamente hacia donde ir; tengo miedo de lo que digan los demás, no sé por donde empezar»
¿Te identificas con alguna o algunas de estas frases?
Suena angustiante y triste, pero aunque esas emociones eran desagradables, en realidad fueron mis grandes guías, pues me indicaron que algo hacía falta cambiar en mi vida.
No obstante, no me animé a dar el salto inmediatamente después de hacerme consciente de la necesidad de cambiar.
Pasaron casi 5 años hasta que a la vida no le quedó más remedio que aventarme al vacío junto con mi miedo para que abriera mis alas y me dispusiera a crear la transformación que tanto necesitaba.
Hoy creo que, si la duda hace su aparición sobre si hace falta un cambio es porque en verdad necesitamos hacerlo, y que es maravilloso el abrazar una nueva etapa, pues esto nos permite tener una vida nutrida.
Obtener claridad antes de cambiar tu vida
Primeramente, si deseas ganar claridad sobre tu estado actual, te propongo que respondas las siguientes preguntas utilizando papel y lápiz o bolígrafo (la escritura nos brinda una maravillosas respuestas), destina un espacio y momento tranquilo y de privacidad para honrar este tiempo de autodescubrimiento y conexión.
- ¿En verdad disfrutas la rutina de tu día a día? ¿Por qué?
- ¿Te sientes con energía con el estilo de vida que llevas? ¿Por qué?
- ¿Las personas con las que compartes tu vida cotidiana suman a tu crecimiento y bienestar?
- ¿Amas tu profesión? ¿Por qué?
- ¿Consideras que estás ejerciendo tu propósito de vida? ¿Por qué?
- ¿Cada lunes te llena de entusiasmo? ¿Por qué?
- ¿Sientes que fluyes con facilidad con el curso de la vida? ¿Por qué?
- ¿Cómo es la vida de tus sueños? ¿Coincide con la que estás viviendo ahora?
Si respondiste “no” a más de 2 preguntas, lo más probable es que necesites recurrir a tu brújula interior para re-direccionar tu camino.
Ciertamente, tomar otro camino puede ser algo que nos cause mucho miedo e incertidumbre, pero eso es completamente normal.
Nos han enseñado a temerle al miedo y verlo como enemigo, cuando en verdad es un gran amigo (al que hay que ponerle límites) su función es protegernos, es esa luz roja que nos alerta sobre si es seguro avanzar o no.
Cuando nos planteamos realizar un cambio puede que el miedo haga acto de presencia porque no sabemos si eso implicará una “amenaza” a nuestra integridad.
Entonces, para tranquilizarlo, tenemos que hacerle ver que todo estará bien, para lograrlo, las siguientes preguntas poderosas nos pueden ayudar a disminuir su intensidad, propiciaremos la confianza y el entusiasmo en esta nueva etapa que está por comenzar.
Tip extra: Puedes apoyarte de la meditación para conectar contigo y obtener respuestas más certeras. Comienza tu práctica con meditaciones guiadas.
Tranquilizarte ante el miedo
¿Qué pasaría si no doy este paso
Cuando no nos atrevemos perdemos la oportunidad de crecer y de aprender. Yo creo que el verdadero fracaso es quedarnos inmóviles sin haber intentado algo nuevo, pues, al fin y al cabo, si no obtenemos eso que tanto queremos, sí o sí, ganamos experiencia y conocimientos para hacerlo mucho mejor la próxima vez.
¿Qué pierdo si me atrevo a transformar mi vida?
Esta pregunta me ha ayudado muchísimo porque me doy cuenta de que en realidad lo que perderé es angustia, estrés, duda, miedo e incertidumbre.
Te harás consciente de que NO pierdes algo vital ni que te hará sufrir.
- ¿Qué sería lo peor que me podría suceder al tomar otro camino?
- ¿En verdad podría suceder algo catastrófico? Lo más probable es que no así que, querido miedo: tranquilo, vamos a estar bien.
- ¿Podría remediar las consecuencias que deriven de esa decisión? ¿Cómo?
Como dice mi abuela: “Todo en esta vida tiene solución, menos la muerte”, respira, estamos rodeados de recursos que nos ayudarán a salir adelante, solo tenemos que poner atención y pedirlos, tampoco van a caer solitos del cielo (aunque algunas veces puede que sí).
Te darás cuenta de que si elaboras un plan de emergencia, disminuye la angustia, pues sabes que es lo que harás en caso de que las cosas se salgan un poquito de control.
¿Qué gano al atreverme a transformar mi vida?
Una de mis preguntas favoritas; aquí descubrirás un mar de increíbles posibilidades. Puedes ganar satisfacción, felicidad, plenitud, empoderamiento, seguridad; un nuevo lugar en donde vivir, una nueva escuela, un nuevo trabajo, una nueva profesión, un negocio propio, un nuevo amor, más dinero, más paz, etc. etc.
¿Te das cuenta de que hay muchísimo que ganar?
¿Cómo me hará sentir ese cambio?
Pregúntate qué emociones experimentarás con esa nueva vida, algunos ejemplos: poderosa, valiente, capaz, plena, libre, curiosa, saludable, admirada, reconocida, amada. Deja que esas emociones sean tu guía y emprende el camino hacia la vida que sueñas.
Amígate con el miedo para poder cambiar tu vida
Así que, si descubres que a tu vida le hace falta un cambio, pon más atención a tu corazón para que escuches que es lo que tanto anhela o qué es lo que le haría sentir lleno de satisfacción. Puedes incorporar algunas prácticas que te ayuden a estar en mayor sintonía contigo misma como las que te comparto aquí.
Por ejemplo: puede ser que tenga ganas de una nueva profesión porque la que tienes actualmente no te hace del todo feliz o no te llena el alma, entonces, escuchas esa vocecita que te dice: siempre quise ser pintora.
Una vez que identificas eso que te despierta una gran curiosidad y entusiasmo, comienza a sumergirte en el tema sin abandonar por completo tu trabajo y/o profesión actual en un abrir y cerrar de ojos, pues, el cambio debe ser progresivo.
Cuando te das la oportunidad de saborear eso que tanto disfrutas y lo vas incorporando a tu vida, llegará el momento en el que sientas que ahora sí estás completamente lista para dedicarte exclusivamente a ese nuevo proyecto o vida.
Tus sueños son válidos, y tienes el poder de hacerlos realidad
No te voy a mentir, el cambio puede un proceso incómodo que requiere mucha valentía y coraje, pero vale todo el amor y el esfuerzo; te llenarás de una gran satisfacción y harás de tu vida una experiencia deliciosa y nutrida.
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